sábado, 29 de agosto de 2015

Después de una semana...

Abrí los ojos y me encontré tumbada mirando a un techo gris.
- ¿Qué? ¡Agh!
Me dolía toda la parte de mi tripa y detrás.
- ¡Akame-chan! ¡Estás despierta!
Nura se puso en pie y fijamos nuestras miradas. Su pelo moreno caía hacia mí pues estaba en su versión humana.
- N-Nura-kun... ¿qué...?
- Te desmayaste.
- Pero... ¿Y los demonios? ¿Hagoromo Gitsune? ¿Sesshomaru?
- Los logramos despistar. Por ahora.
- Y gracias a mí - dijo otra voz.
Se acercó otro chico, de pelo moreno y ojos grises... pronto le reconocí.
- ¡¿Hiroito-kun?! ¡¿Pero cómo...?
Intenté levantarme, pero el dolor invadió todo mi cuerpo.
- Auch...
- ¡Quietecita! Lo de curarte las heridas también fue gracias a mí.
- ¿Nani?
- Eso es cierto - afirmó Nura. - Aquí el amigo sabe bastante de medicina.
- N-No lo sabía.
- Es una técnica secreta de los demonios lobo - explicó Hiroito.
- Bueno... ya no es tan secreta - corrigió Nura.
Cruzaron las miradas como recordando algo que se habían dicho antes, comos si hubieran estado hablando hace un rato.
Me toqué la tripa y vi que estaba vendada.
- Es todo un milagro que estés viva - dijo Hiroito. - Supongo que esos poderes de fénix que tienes te han hecho más resistente, pero... desde luego que si vuelven a hacer pincho moruno contigo, no tendrás tanta suerte.
- Ungh~
- ...
- ... - Nura frunció el entrecejo.
- Tú... ¿cómo es que... estás vivo? - pregunté a Hiroito.
- Me diste por muerto después de... hacer pincho moruno conmigo ¿no? Pero, como ahora ya sabes, sé bastante de heridas. También a mí me falto muy poco... pero sí, estoy vivo.
- Ya bueno pero... ¿estás en Madrid y no en Tokyo?
- Cuando logré curarme, vino un tío raro que parecía ser amiguito tuyo. Se hacía llamar Dante Sparda.
- ¡¿Dante-kun?!
- Sí, el cazademonios que viaja entre dimensiones. Me cogió y me llevó a una nube roja... después de eso, aparecí aquí en Madrid.
- Pero... se supone que Dante-kun lleva los demonios al Purgatorio o al Infierno.
- Pues parece que esa teoría no la aplicó conmigo.
El tono de voz de Hiroito había cambiado. Había pasado de ser una mezcla entre picardía y dulzura a... algo como rencor, chulería e ironía. Vestía diferente. A pesar del calor que hacía llevaba una cazadora negra (que contrastaba con la ropa que llevaba en Tokyo, que solo llevaba pantalones), vaqueros del mismo color pero desgastados y unas zapatillas negras y blancas.
Se llevó la mano a uno de los bolsillos de su cazadora y sacó una pequeña caja. De esta, a su vez, sacó un cigarrillo. Se lo llevó a la boca y del otro bolsillo sacó un mechero. Al encenderlo debajo del cigarrillo, este empezó a echar humo y a consumirse lentamente.
- ¿Desde cuando fumas? - pregunté arqueando una ceja.
- Desde que lo probé en este mundo ¿queréis?
Respiré un poco de humo y me pareció lo más asqueroso del mundo.
- Soy más de mi pipa, ya lo sabes - respondió Nura.
- ¿Tanto os conocéis? - pregunté.
- Tampoco tanto - respondió Nura. - Mientras estabas dormida toda esta semana, hemos estado hablando de bastantes cosas.
- De demonio a demonio - añadió Hiroito.
- Espera ¿Qué quiere decir "toda esta semana"?
- Que has estado una semana dormida - dijo Nura.
- ¡¿Una semana?!
- Si~ - afirmó Hiroito - ¡Ah! Y los humanos esos que conocisteis han estado viniendo por aquí para ver cómo estabas.
- Criis-sama, Vero-sama y Alberto-sama - aclaró Nura.
- Yo que vosotros me acostumbraría a dejar de decir eso de "-sama", "-chan" y "-kun" - comentó Hiroito.
- Pero... ¿una semana? ¿Y no habéis encontrado la forma de salir de este mundo?
- ¿Crees que si lo supiese me las habría apañado todos estos meses para sobrevivir aquí? Tengo este apartamento, ropa, comida... - dijo Hiroito.
- Y todo porque eres un ladrón-senpai - apuntó Nura.
- ¿Ladrón? - pregunté.
Hiroito miró a Nura con el ceño fruncido.
- ¿Y qué querías que hiciera? Tú también  hubieras hecho lo mismo, Nurarihyon ¡No trates de desacreditarme!
- ¿Qué hiciste? - quise saber.
- Estaba abandonado ¿vale? Pasé una larga temporada viviendo en Casa de Campo, un parque que hay al  oeste de aquí, pero todo acabó cuando vinieron a por mí Kazuki y Koga.
- ¡Pero ellos te estaban buscando! ¡Podrías haber vuelto con ellos a Tokyo! - dije.
- ¿Que me estaban buscando para volver? ¡Eso es mentira!
- ¡¿Qué?!
- Hace mucho, incluso antes de que te fueras a ese viaje a lo del Fénix, dejé la manada.
- ?!?!?!
- La dejé por Akane... Habíamos planeado un futuro juntos... lejos de los que dictaban cómo tenían que funcionar nuestras razas... parece una locura ¿no?
- ... Akane-chan no me dijo nada de eso nunca.
- Os enfadasteis.
- Hicimos un viaje a otra dimensión e hicimos las paces.
- Ah.
Hiroito continuó hablando tras un incómodo silencio.
- La manada me tachó de traidor. Cuando me amenazaron de que me iban a sacar las tripas, huí en busca de Akane, que se había ido visitarte a tu nuevo templo. Ya te sabes toda la historia de entonces... Luego cuando después de aquello los vi en Casa de Campo, supe que me tenía que ir de allí lo antes posible. La noche antes de partir, les espié y dijeron que habían mentido a "los otros demonios esos que se creen reyes ", que no querían vengar mi muerte sino conseguir los poderes de la "Phoenix Slayer" cuando viniese a Madrid, y que con su poder gobernarían todas las dimensiones y serían los verdaderos señores del Pandemonio.
- Gilipollas... - murmuró Nura.
- ¿Cómo sabían que íbamos a venir? - pregunté.
- "Es lo que dijo la Bruja del Sol" dijeron - respondió Hiroito. - Yo... no sabía qué hacer ¿vale? asique
supuse que si esa bruja tenía algún poder de verdad, podría ayudarme. Asique me fui a "Sol" (por el nombre supuse que estaría allí) y pregunté a la gente. Me miraban raro... y no me extraña porque solo iba con mis pantalones  de Tokyo y una camisa vieja que encontré por Casa de Campo. Nadie sabía dónde estaba la bruja esa... Ya cuando me rendí, a la noche, me fui por una calle repleta de... bueno, prostitutas. Fue entonces cuando... una mujer morena de piel y rizos castaños se acercó y me dijo "Yo puedo ayudarte". Al principio pensé que era una prostituta debido a su forma de vestir y su maquillaje, asique al principio la rechacé hasta que me susurró al oído... "Tú no no eres de este mundo". Me giré sorprendido y me hizo un gesto para que la acompañase. La seguí y entramos en un sitio que parecía ser... bueno... unos apartamentos para que las putas hicieran su labor. Entramos en un apartamento que... su decorado interior me llamó la atención. Todo estaba lleno de amuletos con símbolos y telas doradas y de colores chillones. Un espectáculo. Al fondo había una cama y me temía lo peor, pero se sentó en una silla frente a una mesa redonda. Me senté en la del extremo y...
- Ahora viene la superparte - dijo Nura.
- ¡Nura-kun! - le rependrí.
- Aquella mujer era la Bruja del Sol. Lo supe en cuanto empezó a hacer gestos con una bola de cristal y comenzó... bueno, a haber magia. Me dijo que podía darme un apartamento y una tarjeta de crédito con montón de dinero de un tío rico que acababa de morir. Nadie sospecharía nada... pensarían que sería su heredero. Asique acepté.
- Pero... ¿no te pidió nada a cambio?
- Sí...
- ...
- Que matase al verdadero heredero de esa propiedad. Me dijo su nombre y la calle donde vivía junto con una foto para reconocerle.
- ...!!
- Y... mierda... Lo hice.
- Por Buda...
- ...
- ...
- ...
- ... ¿Por qué te pidió la Bruja del Sol que matases a aquel chico?
- Dijo que quería vengarse de aquella familia, que la arruinó. No me dijo nada más.
Pasamos un rato de silencio hasta que Hiroito dejó la colilla del cigarro en un cenicero de la mesa y dijo que iba a por una lata de "Monster". Se fue a la cocina. Nura me ayudó a incorporarme en el sofá donde estaba tumbada. Una vez sentada, vi todo el salón... Moderno, de paredes grises, muebles negros y blancos, cuadros abstractos de fondo blanco y manchas negras... Me fijé en mi ropa. Llevaba la misma camiseta negra pero estaba rasgada y remangada, supuse que tuvieron que ponerla así para ponerme la venda de mi tripa, la falda... más de lo mismo. Tenía el pelo suelto y estaba descalza.
- Creí que nada podía sorprenderme ya - comenté.
- Opino lo mismo - dijo Nura.
Me fijé en que Nura llevaba una camiseta diferente. Azul con unos ojos saltones y una boca sonriendo dibujados.
- Dijo Criis-sama que era el Monstruo de las Galletas -U- - comentó él al ver mis ojos posados en la camiseta.
Le quedaba un poco justa, pero estaba bien. Sonreí.
- Tengo una idea... - dije - no sé si...
- ¿Una idea?
- Para volver a Tokyo.
Nura se acercó más a mí, como si no quisiera que nadie más se enterara.
- ¿Sí?
- Hiroito-kun ha dicho que Dante-kun fue quien le envió aquí. Eso quiere decir que él puede venir a rescatarnos.
-  Posiblemente... es verdad... La pregunta es que cómo le avisamos de que estamos aquí.
- Debe estar buscándonos... junto con Rei-kun. Lo mínimo que podemos hacer es avisarles de que estamos aquí.
- ¿Cómo?
- Con la magia de la Bruja del Sol.
- ¡¿Estás loca?! ¿Has visto lo que ella pide a cambio luego? ¡A saber que nos pediría para pagar!
- Es la única persona en Madrid que sabemos que tiene magia.
- Escucha, Akame-chan. Sé que dijimos que en Madrid no hay magia, pero al parecer está escondida. Solo hay que encontrar...
- Si Hiroito-kun la encontró fue de casualidad y porque también ella se dejó ver. Pero no tendremos otra vez esa suerte...
- ...
- No tenemos otra opción... y cuanto antes nos vayamos mejor. Teniendo a Sesshomaru, Hagoromo Gitsune, Kasuki y Koga persiguiéndonos...
- Lo pensaremos - concluyó Nura.
Llamaron al timbre y pegamos un saltito en el sofá. Hiroito se acercó a la puerta sigilosamente hasta que desde fuera gritaron:
- ¡Somos nosotros!
Hiroito abrió. Eran Criis, Vero y Alberto.
- Konnichiwa, minna ^D^~
- Holaa~
- Buenas <_<
Pasaron al salón y, cuando me vieron, Criis pegó un salto:
- ¡AKAME! ¡ESTÁS DESPIERTA! *O*
- Por fiin, gracias a Dios... - dijo Vero.
Había un chico junto a ellas. No le había visto antes, pero supe que era el "amigo" de Vero, Alberto. Tenía el pelo castaño peinado hacia delante con flequillo y ojos marrones. Vestía con un polo azul cyan con un pequeño cocodrilo bordado a un lado del pecho, bermudas de color blanco hueso y zapatillas azules.
- Nos habías dado un susto - dijo Criis - No teníais que haber salido de casa así... ya convencí a mi hermana y...
- Sí... muy a mi pesar ~~ - dijo ella.
- Está un poco molesta de haber metido a Alberto en esto ¡pero no pasa nada!
- ¡Y-Yo no dije eso! - aclaró ella.
Alberto sonrió. Se acercó y preguntó.
- Soy Aberto, Akame ¿Que tal eso?
- Bueno... he estado mejor, gracias.
- Para todos nosotros es increíble esto - comentó Criis - ¡Y no sabíamos de que ya teníais un amigo por aquí!
- Tampoco lo sabíamos nosotros - dijo Nura.
- Bueno... debes de tener hambre ¿no? Después de una semana... - dijo Criis.
- Sí... espero.... que pueda comer algo - dije viendo mi tripa vendada.
- Obviamente - dijo Hiroito - Ahora preparo algo.
- Mmm... no hace falta... - dije.
- Si queréis vamos al Starbucks - sugirió Vero.
- Noooo, tíiiio.... odio ese sitio.... - se quejó Criis.
- ¿Y al Vips? - preguntó Alberto.
- ¡Vale! *^*
- Bueno... vale~
Vero abrió un bolso grande que llevaba y sacó ropa.
- Akame, puedes usar esto. No quiero que Criis haga otro de sus experimentos.
- ¡No son experimentos! ¡Le quedaba bien el modelo gótico!
- Pues ahora ya no está - dijo señalando mi ropa rasgada.
- L-Lo sé T____T pero bueno :3
- Puedes cambiarte en la habitación del fondo del pasillo - dijo Hiroito.
Vero dejó la ropa en la mesa.
- Cuando termines avísanos




sábado, 22 de agosto de 2015

Una canción de amor de su trágico destino - parte 2

Como ya  dije en http://diariodeakame.blogspot.com.es/2014/09/una-cancion-de-amor-de-su-tragico.html , esta es una historia paralela a la de Akame: la historia de Kikyo en el anime "Inuyasha" Este es un capítulo paralelo a todo lo que está pasando pero desde el enfoque de Kikyo. NO ES OBLIGATORIO VERLO. Y os digo que, si veis esta parte, os ruego que no paséis a la parte 3 porque lo subiré cuando sea el momento. 

Un saludo, lectores n_n 


Enemigos

Se me hacía raro ver a Nura con su aspecto de siempre pero con vaqueros y camiseta de "Metallica".
Nura me bajó de sus brazos en una azotea. Miré abajo y vi que el edificio estaba algo inclinado y que, a su vez, tenía un edificio gemelo al lado.
- La arquitectura de este mundo es un tanto extraña - comenté.
- Y hay una cosa curiosa... - añadió Nura.
- ¿Cuál?
- ¿Te has fijado en que no hay una sola gota de magia?
- ???????
- Mírales.
Nos asomamos y vimos cómo la ciudad se extendía a nuestros pies. Alrededor nuestro vimos un par de bocas de Metro en cuyos letreros rezaba "Plaza de Castilla". Nura continuó hablando.
- Son personas normales llevando una vida cotidiana sin miedo a los youkais y sin confiar en mikos. La magia no cabe aquí, por eso Criis-sama se sorprendió tanto... y por eso tenemos que ocultarnos, porque los que se encargan del orden irían a por nosotros. Madrid... es una ciudad de orden.
Miré a la carretera. Vi los coches pasar muy rápidamente. Uno casi se chocaba con un autobús y empezaron a pitarse y gritarse.
- Ungh... ¿orden? Que no tenga magia no quiere decir que vivan relajados... Yo noto mucho caos...
- Bueno... tienes razón x_x
- Pero... si no hay magia... ¿cómo pretendemos conseguir un portal?
- Ungh... como la magia no esté escondida...
- O podamos crearlo de alguna manera...
Nura me miró extrañado.
- ¿A caso sabes hacer eso?
- Si en este mundo hay que preservar el orden al igual que se debe preservar en nuestro mundo... significa que sí hay una forma de perturbarlo. Destruir el mal, cuidar de la salud de las personas... son tareas que me enseñaron en la escuela de sacerdotisas... Aquí pasa lo mismo, asique siempre se puede perturbar algo... para conseguir un portal a otra dimensión, por ejemplo...
- No me he enterado de mucho. Pero... ¿vas a ir entonces en contra de tus propios principios de sacerdotisa?
Me toqueteé las coletas.
- No hay otra opción que se me ocurra...
Nura sonrió con malicia.
- Qué miko más rebelde... a_a si hay que fastidiar un poquito a las personas me apunto~
- e_Ê Ni se te ocurra, youkai malo.
- ¿Entonces cuál es el plan? Ni tú ni yo hemos abierto un portal en la vida. Y posiblemente lo que tú creas solo sea aplicable a la Tierra, cada dimensión es diferente...
- Lo sé pero... siento que esta dimensión tiene la misma esencia que la nuestra... llámame loca, sí x_x ¡Pero bueno! El plan debería ser... encontrar algo de información si es que la hay aquí... Algo sobre portales a otras dimensiones o, como mínimo, algo para comunicarnos con alguien de la Tierra o del Cielo para pedir ayuda.
- Pues...
- AAUUUUUUUU~ - oímos desde lejos.
- ¿Pero qué:..?
Nura y yo nos giramos a la azotea del otro edificio, la voz provenía de allí. Vimos cuatro figuras humanas acompañadas de una manada de lobos.
- JAJAJAJAJA~ - rió alguien con una voz rota.
La Luna nos dejó ver a un hombre de casi 30 años vestido de pieles grises con el pecho al descubierto. Tenía el pelo castaño, la barba afeitada de hace unos días y ojos amarillos. A su lado había un chico más joven que también vestía de pieles, esta vez, verdes y cubría su pecho con una coraza. Tenía el pelo moreno recogido por una cola de caballo.
El chico de pieles grises, que daba la sensación de ser el jefe, volvió a reír.
- Bienvenidos a las Torres Kio~
- En realidad eso debería decirlo yo - dijo otra voz desde atrás, que esta vez me sonaba. - Tu sede es Casa de Campo.
Se acercó a él y... era un demonio de pelo blanco y largo que vestía de kimono blanco y rojo...
- ¡No te quejes, Sesshomaru! ¡Yo soy el rey de los lobos! - espetó el de pieles grises.
- ¡Y yo el legítimo rey de los youkais, Kazuki!
- Gilipollas... - murmuró Nura.
- ¡Oye! ¡Que el que puso los lobos fui yo! - gruñó el de pieles verdes.
- ¡Dejad de discutir, idiotas! - dijo una voz femenina desde atrás.
A pesar de que la luz de la luna fuese más potente a medida que la noche era más intensa y pudiésemos ver mínimamente a aquellos tres, la chica era irreconocible para mí. Era una figura alargada totalmente de negro, aunque su piel parecía ser más blanca que la leche.
- No... - murmuró Nura. Se acercó a mí y me susurró al oído. - Esa es... Hagoromo Gitsune.
- ¡Gilipollas! - maldije.
- !?!?
- ¡Perdón! Tienes razón, es un vicio...
- Debemos matarlos cuanto antes... Empezando por Nurarihyon - sugirió Hagoromo Gitsune.
- ¡No! ¡Empecemos por la sacerdotisa! - dijo el de verde.
Kazuki, el de gris, le agarró del brazo.
- Koga me ha dado una idea... ¿Y si vosotros, Sesshomaru y Gitsune, vais a por el Señor del Pandemonio, y nosotros vamos a por la Phoenix Slayer?
- Recuerda, Kazuki, que el poder del Fénix me corresponde a mí tal y como acordamos - dijo Sesshomaru.
- Y tú recuerda, Sesshomaru, que el título de Señora del Pandemonio es mío... por lo que YO seré la reina de los youkais... ¡tal y como acordamos! - intervino Hagoromo Gitsune.
- Bueno... "Ella" dijo de re-negociar los términos que acordamos - dijo Koga, el de verde.
- ¡No! ¡Ella ni está aquí! ¡No tiene derecho a nada! - gruñó Sesshomaru.
- Dijo que quería ocuparse de un asunto personal importante que luego nos facilitaría todo... - explicó Koga.
- Sabía que algo de esto pasaría... - comentó Kazuki llevándose la mano a la cabeza.
Decidí no preocuparme por lo que estaban diciendo y sobre esa tal "Ella". Me limité a susurrar a Nura:
-  No podemos contra esos cuatro.
- Esos malditos de Sesshomaru y Hagoromo Gitsune... supuse que tarde o temprano se aliarían... aunque dejé de pensar en eso tras mandar a esa zorra al Infierno. Pero los otros dos tíos no los conozco...
- "Los otros dos tíos" de pieles son demonios lobo. Son los que controlan toda esa manada. Y tienen pinta de ser enemigos del Templo del Gato Negro.
Nura desenvainó a Nenekirimaru.
- ¿Amiguitos del tal Hiroito?
- Woo~ Nurarihyon se enfada...~ >:) - dijo Sesshomaru preparando sus garras venenosas. - Prepárate para morir.
Hagoromo Gitsune sonrió maliciosamente y de... atrás~ salieron cantidad de colas enormes de zorra blanca que se dirigían hacia Nura.
- ¡MIEDO! - gritó Nura, y apareció junto Sesshomaru y Hagoromo Gitsune. Se dispuso a luchar... con vaqueros y camiseta de Metallica x_x
Kouga, el demonio lobo de pieles verdes, desenvainó su katana.
- Vengaremos a nuestros hermano.
- Sí.
Kazuki, el de pieles grises, corrió y pegó un salto tan grande que consiguió llegar hasta la azotea donde yo estaba. Le siguieron Koga y la manada de lobos ¿Cuántos eran? ¿20?
- ¡Vamos, Koga! ¡Acabemos con esto!
Desenvainé a Guesshoku. PERO... ¡VAMOS A VER! ¡20 LOBOS Y 2 YOUKAIS SALVAJES! ¡No podía contra todo eso yo sola!
- O sí - murmuré. Alcé un brazo gritando - ¡RAYOS YIN!
De mis manos salieron Rayos Yin que salieron disparados hacia ellos. Grave error. Fueron rápidos y los desviaron y 20 lobos grandotes se abalanzaron sobre mí.
- ¡Como me rompáis la ropa os mato! - les amenacé.
Uno me dio un zarpazo en la tripa y la camiseta se rasgó mientras que otro tiraba de mi falda hasta arrancar un pedazo de esta.
- ¡MIERDAA! X______________X
Invoqué el poder del Fénix y el iris de mis ojos se volvió de fuego. Ordené a... lo que se que tuviese en mi sangre, que llenase de llamas mi katana.
- ¡Probad a Nisshoku ardiente!
"O llameante, o quemada, o chamuscada" pensé.
Vencí al primer círculo de lobos y los de detrás retrocedieron. El de gris ya iba a pegarme una patada y me iba a defender con Nisshoku cuando de pronto... Ahogué un grito. Una katana me atravesó desde atrás.
El dolor invadió todo mi cuerpo y perdí el equilibrio. Me caí hacia adelante y la sangre comenzó a extenderse por el suelo. Koga miraba su katana llena de sangre que echaba humo. Rió maliciosamente y me pisó la espalda. Mis ojos volvieron a ser de su color marrón de siempre.
- Buen trabajo, Koga - dijo Kazuki orgullosamente.
Se llevó las manos a la espalda y sacó dos espadas. Las miré abriendo más los ojos.
- Shouken... la técnica de la doble espada...
- La conoces bien, Akame Scarlet Targaryen - dijo Kazuki resbalando el filo de una espada con el de la otra, para que corten mejor...
Los lobos comenzaron a aullar como locos y Nura me miró desde su posición.
- ¡AKAMEEEEEEEEEEEEEEE-CHAAAAN!
Le miré y vi que se estaba enredando entre las colas de Hagoromo Gitsune. Sesshomaru iba atravesar sus garras en Nura, pero estaba bajo los efectos del Miedo de Nura. Mientras miraba hipnotizada a Nura luchar y la herida me iba matando poco a poco, oí la voz rota de Kazuki decir:
- Vengaremos la muerte de Hiroito Kireute, y con el poder del Fénix Legendario seremos los demonios más poderosos y temidos de todas las dimensiones ¡A la mierda los pactos con esos idiotas encaprichados con Nurarihyon... ¡podemos ser los amos del universo ya y sin ellos! Y, por supuesto, destruiremos el maldito Templo del Gato Negro.
- Grrrrr - gruñí - eres muy tonto como para decir tus planes antes de matar a la Phoenix Slayer - ¡ESCUDO DEL YANG!
Cuando aquella luz blanca me rodeó Koga retiró su pierna de mí y retrocedió junto con Kazuki y la manada de lobos. Koga corrió otra vez hacia mí con su katana llena de mi sangre y esta entró en contacto con mi luz del Yang.. La sangre de la katana echaba humo... e hizo un agujero en mi escudo.
- AAAAHHHHH! - grité de dolor. Me estaba desangrando. Retiré el escudo.
Kazuki caminó hacia mí. Hizo crujir los huesos de sus garras... las cuales pronto iban a atravesar mi cuerpo.
- Grr JAJAJAJA - rió Kazuki.
Cuando comenzó a atacar, una mancha oscura apareció interponiéndose. De ahí salió Nura, que cortó las manos de Kazuki.
- ¡NO TOCARÁS A LA CEBOLLATISA!
- AAAAAAAAAAAAAARGGGGHHHH!! - gritó Kazuki. Sus manos estaban, literalmente, en el suelo.
- ¡MALDITO! - gritó Koga. Se lanzó contra Nura y ambos youkais chocaron sus katanas.
- ¡NO HE TERMINADO CONTIGO, NURARIHYON!
Sesshomaru se había transformado en un gigantesco perro blanco de ojos rojos. Encima de él estaba Hagoromo Gitsune riendo mientras abría un gigantesco abanico metálico .
- ¡Estás acabado! ¡JAJAJAJAJAJA!
No iba a poder contra todos ellos. Los lobos ya se estaban acercando. Aquello era demasiado...
Mi vista se nubló y apenas veía ya lo que ocurría. Fue cuando apareció otra persona con otras dos espadas. Se puso a atacar a nuestros enemigos. Nura dijo:
- Tú...
Caí desmayada.


jueves, 20 de agosto de 2015

Manga

Vestirme totalmente de negro no sé si era lo más acertado. La camiseta apretujaba; la falda, las botas largas y esos extraños guantes de cuero negro me hacían sentirme extraña; por no mencionar mis dos coletas "a lo Hatsune Miku", o algo de eso fue lo que dijo Criis.
Sin embargo, Nura estaba más raro aún. Su pelo era moreno y caía por la espalda, y sus ojos se habían
vuelto del mismo color que esa extraña bebida llamada "Coca-Cola" que Criis trajo de la cocina, aunque aquellos ojos de youkai camuflado reflejaban la misma esencia... esa mirada tan... suya.
No me quedó muy claro de dónde sacó Criis la ropa de Nura. Algo de que los pantalones y las zapatillas eran de un antiguo cosplay de "Nico Di Angelo" y algo de que su camiseta de "Metallica" se la tenía que cuidar por ella.
- Guapíísimos -D- - comentó aquella loca.
- Etto... no sé si esto... - intentaba decir mientras me ruborizaba al ver que Nura me miraba de arriba a abajo.
- No estás mal, Cebolla gótica -U- - comentó él finalmente.
- MEEEH ¬O¬
- Chicos... me raya decirlo pero... aunque mi hermana puede cubrir lo de que os quedéis aquí, cuando vengan mis padres tendréis que marcharos...
- Qué poco hospitalarios~
- ¡Nura-kun! e_ê ¡Ha hecho más de lo que debería!
- ¡En origen mi familia se dedicaba a meterse en las casas de la gente y robarles la comida! ¡Intentaré hacer algo aquí, aunque nunca antes fuese necesario en mi generación!
 Nura se acercó y cogió un peluche redondo con cara de gato. Parecía que se lo iba a lanzar a la cara a Criis (o a mí e.ê)
- PERO QUÉ HASEEES XDX)/ - grité
- ¡MI NEMUNEKO, CAPULLO! D8< - chilló Criis.
- ¡GILIPOLLAS! - dijo Nura.
Me abalancé sobre él.
- ¡DEJA DE DECIR ESO!
- ¡NOOOO!
Eché fuego por la boca y se lanzó a un lado.
- ¡NO HAGÁIS ESO, QUE ME DESTROZÁIS LA HABITACIÓN! D8< - gritó Criis.
Nura cogió a Nenekirimaru.
- ¡CEBOLLA!
Mis ojos comenzaron a arder y me hice un arco de fuego con llamas. Le apunté y grité:
- ¡¡YOUKAI!!
Y, acto seguido, oímos desde la puerta de la habitación...
- ¡¡CRISTINA!!
Vero nos estaba mirando. En ese momento Nura estaba sosteniendo a Nenekirimaru y yo un arco de fuego. Criis palideció al ver a su hermana.
- Etto...  Nee-san~ ¡Son malabaristas! 8'D
- ¡¿Te crees que soy idiota?!
- Oc, no...
Mis ojos volvieron a ser marrones y mi arco desapareció. Vero dio un paso hacia atrás y dije:
- Diría que no es lo que parece pero...
- ¡Cristina! - llamó Vero sin quitarme el ojo de encima - ¿Qué es...?
- Es alucinante, Vero. Yo... - Criis nos miró - opino casi lo mismo que tú... ¡pero no tienes que tenerles miedo! ¡son la hostia!
Vero frunció el ceño y no me gustó lo que podía significar.
- ... Llamaré a papá... a mamá... y a la policía.
Criis corrió hacia ella.
- ¡¡NO!! ¡Hablemos en el salón!
- ¡No quiero chafar mi cita con Alberto!
- O.o! o... a... o... (a_a) ... ¿no deberías estar con él?
- Me está esperando abajo. Se me olvidó una cosa que quería regalarle... ¡diiigoooo...! ¡prestarle! A ver, nunca le regalaría nada ~
Criis asintió, salió de la habitación y cerró la puerta. Nura colgó su espada a la cintura, cogió un especie de saco (¿mochila?) y empezó a meter su ropa y la mía en ella.
- ¡Escapemos! - dijo al ponerse la mochila a su espalda.
- ¡Nura-kun! ¡No podemos hacer eso! ¡Criis-sama se ha portado muy bien con nosotros!
- ¿Pero has visto a su hermana? ¡Nos meterá en un lío si llama a la policía! Y a Criis-sama también...
- No deberíamos dejar a Vero-sama asustada... Ha pasado por mucho según nos ha contado Criis-sama...
Nura se acercó a la ventana y abrió.
- Despertaré mis poderes de youkai y te llevaré a algún sitio lejos de aquí ¡Encontraremos la forma de irnos a nuestro mundo de otra forma!
- No sabemos las costumbres que tienen aquí. Si hacemos algo raro, llamaremos la atención y habrá problemas como los que dijo Criis-sama.
Nura miró hacia atrás y dio una vuelta por la habitación con la mirada.
- Puede que este mundo sea complicado ¡pero los hay peores! Estaremos bien, ya... - fijó la vista en unos libros de la estantería - ... verás.
Se acercó a ver y sacó un tomo que ponía "Nura, el Señor de los Youkais".
- No puede ser... - murmuré.
En la portada estaba él, o como mínimo alguien parecido a él. Al abrir el libro, vimos que era una historieta contada a través de viñetas. A eso mi cabeza lo relacionó con un término... llamado "manga".
- ... ¿Es... ... es mi historia? ... Pero... ¡si es mi Clan!
Pasé un par de páginas y vi a una chica vestida totalmente de negro.
- ¿Conoces a esa?
Nura frunció el ceño.
- Esa batalla no fue así... ¡Ah! Y sí... ella es una enemiga de mi Clan y de mi familia. Se llama Hagoromo Gitsune. Es un demonio zorro. Es... una zorra~
- Vaya...
Me dirigí a la estantería. Había montones de libros como "Harry Potter", "Los Juegos del Hambre", "Mirai Nikki", "Shingeki No Kyojin", "Inuyasha"...
Cogí un tomo de uno de los de "Inuyasha, un cuento de hadas feudal". En su portada había un chico de pelo blanco con orejas de perro y ojos amarillos que vestía de rojo, una chica morena de camisa blanca con un lazo rojo y minifalda y en grande... la cara de una sacerdotisa...
- ¿Kikyo-chan...? - dije aún sin creérmelo.
Nura apartó la vista de otro tomo de que había cogido de "Nura" con un Nurarihyon abrazando por la espalda a una chica que parecía una ohime (princesa japonesa). Se acercó y apoyó la cabeza  en mi hombro.
- ¿Kikyo-sama aparece ahí?
- Brrr... miiih~ x//x''
- ¿Qué?
- ¡Nada! Eee... ¡sí! Sale aquí y hablan de ella porque dicen su nombre... pero los otros personajes no sé quiénes son y no creo que sean la clase de gente que se junta con ella. Es... como una historia diferente... no sé...
Pasé varias páginas y Nura tocó mi mano para que parase.
- Espera un momento.
Paré y Nura pasó las páginas hacia atrás una por una con cuidado. Dejó abierta la página en donde había un glosario de personajes y en él reconocí a...
- Sesshomaru - dijo Nura.
- PERO QUÉ HACE ÉL AQUÍ TAMBIEEEEÉN X__________X
Nura tiró los tomos a la cama, me levantó y me cogió en brazos. Chillé.
- ¡NURA-KUN! ¡NURAAAAAA! X/////////////x
Saltamos y salimos a la calle. Ya estaba todo de noche, pero vi como la cabeza de Nura se alargaba y su pelo volvía a ser entre blanco y negro.
-  Ya es 14 de julio, asique feliz cumpleaños, Ohime-sama~
- ¿CÓMO? O//___//o
- N-nada x//^//X olvídalo.
Oímos unos gritos. Parecía Criis desde atrás.
- Ungh...
- Estaremos bien - prometió Nura.
Fue cuando miré la luna llena que iluminaba esa noche. Juraría haber oído el aullido de un lobo.






miércoles, 5 de agosto de 2015

Las dos hermanas

Guardé mi Guesshoku debajo de mi hakama y Nura a su Nenekirimaru debajo de su yukata.
Aquella chica, Criis, parecía muy amable. Estaba ayudando a unos extraños de otra dimensión y aún debía preguntarse si en verdad no había perdido el juicio. La entendía perfectamente, yo misma me sentí así cuando conocí a Rei, a Blue, a Dante, a Abbadon, a Cerberus... solo que ella parecía ser alguien más alegre, nos sonreía, parecía estar disfrutando de aquel momento, de ayudar a sus "personajes" de esos manga o lo que fuesen.
Regresamos al metro "Vodafone Sol" y traspasamos las puertas que vigilaban los guardias mediante un pequeño billete rosa que tenía Criis. Nos dirigimos a un andén, el de la línea 1 dirección Pinar de Chamartín. Nos subimos a un extraño vehículo alargado que parecía usar magia. Cuando comenté esto último a Criis, dijo que el metro no era magia, sino ciencia.
- Pero si quieres preguntar algo, hazlo en bajito. - añadió. - La buena gente pensará que sois actores, pero la mala os tomará por chiflados y eso puede ser peligroso.
- ¿Por qué la gente mira tanto mi pelo? - preguntó Nura cuando casi se cepillaba a tres personas de una sacudida de cabeza.
Criis se fijó en Nura. Mientras subíamos al metro, las puertas se cerraban a nuestras espaldas y nos poníamos en marcha, Criis dijo muy en bajito para que nadie escuchase:
- ¡Tú eres Rikuo Nura! Se supone que puedes volverte humano!
- ¿Yo puedo hacer eso? ¡Pero yo soy Nura! ¡Rikuo no!
- Ooooh o_o ! Entonces debes de ser el primer heredero~... ¡da igual! ¡Seguro que con tus poderes de youkai puedes aparentar ser un poco más humano!
- Solo un poco x_x - dije con sarcasmo.
- Etto... (no sé qué ha dicho de heredero) pero... aunque nunca haya hecho algo así... puedo intentarlo.
Parecía que empezaba a concentrarse cuando Criis gritó:
- ¡¡¡Ahora aquí nooooo!!! >O<
Tras pasar por muchas estaciones como Gran Vía, Bilbao y Cuatro Caminos, nos bajamos en Tetuán. Nos abrimos paso entre la gente (gente la cual nos miraba con muy mala cara), pasamos otra especie de puertas y subimos unas escaleras que daban a una calle alargada llena de tiendas y restaurantes de todo tipo, pero, sobre todo, con muuuucha gente.
Seguimos a Criis hasta que, tras caminar por una callejuela perpendicular a la calle principal de donde salimos, nos paramos frente a una puerta. Criis sacó unas llaves de uno de los bolsillos de su pantalón. Introdujo una pequeña llave en la cerradura y la puerta de abrió. Pasamos y subimos a un aparato que según Criis se llamaba ascensor.
- Oíd una cosa.. Si mi hermana se pone borde o algo, disculpadla. Ella es así~~ ¡Ah! Y por ahora no le digáis quiénes sois.
- ¿Entonces qué quieres que digamos? - quiso saber Nura.
- Si os pregunta decid que sois mis amigos. Mis amigos... Juan y Adriana (?)
- Um... ¿Adriana? - dije. - Curioso nombre~
Nos bajamos en el 3er piso y Criis abrió la puerta cuya placa de encima rezaba "Derecha". Entramos en su casa.
Era pequeña (comparada con mi Templo, entiéndeme x_x). Había habitaciones repartidas por un pasillo que daba justo hasta donde estábamos nosotros, en frente había una cocina, y a la derecha un salón bastante más amplio.
- Tadaima, Vero-chan~ ^·^ - dijo Criis. Me sorprendió que hablase en japonés y no en español.
- Cristina... ¡te he dicho mil veces que no me hables en chino, que no te entiendo!
- ¡Es japonés, joooO! >^<
De una de las habitaciones salió una chica un poco más mayor que Criis. Llevaba unas lentes enormes con un borde ancho y negro, un gorro negro y grande, una camiseta oscura que le hacía un escote bastante llamativo, falda al vuelo rosa, medias negras y tacones negros. Tenía los ojos marrones, los labios pintados de rosa y un aro en la nariz que mi cabeza lo relacionaba con la palabra "piercing". Su pelo era moreno aunque lo que me llamó la atención era que las puntas eran rosas fosforito.
- Ayyy, tronca~ pensaba que ibas a llegar más tarde - dijo mientras rebuscaba en un pequeño bolsito negro. - Yo me voy ya~ - Al vernos abrió los ojos como platos. - ¡Hostia puta! Criis, ¿son amigos tuyos de esos que se disfrazan?
- Eeee... ¡sí! Están probando sus cosplays ¿no son geniales? :D
- A mí lo chino ya sabes que no me va mucho... bueno~ la comida china y el sushi están genial~
- No es chino E_E ¡es japonés! - farfulló Criis.
- ¡Lo mismo da! Tu amiga va monilla~ y tu amigo da miedo o_o
- xOx
- e_ê
- Nunca os he visto con mi hermana... ._.
- Son amigos de la última expo 8D - intervino Criis.
- Sí~ Somos Juan y Adriana - dije. - Encantada~
- Igualmente~ Yo soy Verónica o, si lo preferís, Vero.
- ^_^
- nDn
- :) ... - Vero miró a Criis - Oye, Criis~ que me voy ya ¿vale?
Vero se dirigió a la puerta.
- ¿A dónde vas? - preguntó Criis.
- De fiesta~~
- ¿Con quién? <.<
- Ooooj - dio un resoplido y agachó la cabeza. - Bueno... Alberto iba a buscarme ahora a las 7 y media en Estrecho.
- Uuu~ ¿Te vas de fiesta solo con Alberto? aUâ
- Nos vamos a un puuuub... ay~, no sé. Dijo que me invitaba a unas copas y luego quedaríamos con los demás.
- Oh, sí... genial~ AuA Pasadlo bien, tortolitos~
Vero se ruborizó un poco a la vez que esbozaba una cara de enfado. Miró para otro lado y se cruzó de brazos.
- No digas tonterías, Cristina ¡Alberto y yo no somos nada! Ale~ me voy~
Cuando salió cerró la puerta. Criis se volvió hacia nosotros.
- Os dije que era un poco así ~~
- ¿Quién es ese tal Alberto? - pregunté por curiosidad.
- El chico que le gusta~ pero es demasiado tsundere como para reconocerlo.
- ¿Tsundere... ka? - añadió Nura.
- Sí, bueno... es una de las personalidades más famosas del anime: tsundere, moe, kuudere, yandere, dandere, deredere...
- Pero... ¿qué quiere decir tsundere?
- Bueno... es como... alguien que es fría y hostil hacia las personas, pero con el tiempo ves que en realidad es una persona muy cariñosa - oscureció su tono cuando continuó diciendo... - Es todo lo contrario a yandere... que es ser una persona agradable y dulce hasta que luego por lo que sea es violenta y psicópata...
"Eso último no se lo preguntamos" pensé.
Nos fuimos a una de las habitaciones del pasillo. Las paredes eran blancas y azules y estaban repletas de pósters. Había estanterías llenas de figuritas, peluches, libros y... ¿aparatos electrónicos?
- Mi hermana es tsundere hasta conmigo, aunque después de lo del año pasado ya no tanto.
- No es por ser indiscreto pero... ¿qué pasó? - preguntó Nura.
- Ungh... bueno... cuando empezó su adolescencia se fue por el mal camino... supongo que no sabéis lo que son los canis y las chonis pero... bueno~ digamos que se empezó a juntar con chusma... con los típicos idiotas que se creen los más malotes y los más libres que se dedican a fumar de todo... desde tabaco y porros hasta cachimba y marihuana, bailar reguetton, ir a botellones... Mi hermana sacaba notas malísimas, discutía con nuestros padres día sí y otro también, hacía pellas para no ir al insti... Yo la decía que parase de una vez... que nos estaba haciendo daño... sobre todo a ella misma...que así no se podían hacer las cosas... pero me ignoraba y a veces me gritaba. Pasaron los años y... bueno~ me volví friki x_x, y perdió totalmente el respeto hacia mí ¡Me trataba como a una basura! ... El año pasado mis padres de fueron de viaje a Lisboa por asuntos del trabajo y... esa semana... fue cuando sus "amigos" la dejaron tirada... sin razón alguna. Según ellos era una pringada o tal vez ya se estaba empezando a dar cuenta de su error y ellos lo notaron. Aquella noche estaba sola jugando a la Xbox cuando llegó a casa... no la esperaba a una hora tan temprana. Paré la Xbox cuando Vero entró a mi habitación diciendo una y otra vez "Lo siento. Perdóname, Criis. Perdóname..." Sus "amigos" la habían abandonado. Pude haberla pegado una torta pero... me contuve... porque quiero a mi hermana más que a nada. Lloró toda la noche sobre mí... Cuando mis padres volvieron días después, vieron a una Vero completamente distinta... más... buena~ Y ahora... es un poco malota, pijilla y hipster... pero es la mejor♥
- O_O
- o.o
- Me alegro de que esté mejor - se le ocurrió decir a Nura.
- Yo también n_n
Criis se acercó a su armario y lo abrió.
- Bueno... a ver qué podemos hacer para que no parezcáis dos demonios.
- ¡Yo nos soy una demonio! - mascullé.
- a___a ... Podrías usar... jijijiji...
Arqueé una ceja mientras miraba a Criis rebuscar entre su ropa.
- Tú~ Nurarihyon~ Te pondrás alguna camiseta de mis grupos~ pero necesito que te vuelvas humano.
- Vooooy~~
Nura cerró los ojos y se concentró... pasaron dos minutos... tres... tal vez cuatro... y un humo negro le cubrió... Después de que aquel humo se disipase, vi a un Nura... distinto.