viernes, 18 de diciembre de 2015

Akame VS Gyuki



- ¿Cómo te atreves a traicionar a Ayakashi-sama?
- No le estoy traicionando. Le estoy abriendo los ojos. No estarías aquí si nunca se hubiera enamorado de ti.
- ¡¡¡¡¿Qué?!!!! ¡¿Enamorado?! Ò//o//Ó
Miré a Guesshoku, que estaba a casi tres metros de mí.
- Yo que tú no haría eso - alertó el demonio.
Gyuki me amenazó con su katana. Podía ir todo lo rápido que quisiese para agarrar un arma, pero no sabía cómo de rápido era él. Su aura demoníaca era muy poderosa, lo seguro me adelantaría y me mataría a la primera de cambio ¿Qué podía hacer?
- No puedes hablar de esa forma - le reproché. - Debes respetar las decisiones del Jefe.
- Deja de preocuparte tanto por lo que debo o no hacer y preocúpate por ti misma. Porque no vivirás después de esta noche.
- Eso ya lo veremos...
Kumato se lanzó contra Gyuki y le mordió en la pierna. Al segundo, Gyuki cogió al gatomate y lo tiró contra la pared. Maldición... me había dado una rabia terrible, pero había tenido el tiempo justo para correr y desenvainar a Guesshoku.
- Vaya... - dijo Gyuki.
Corrió hacia mí y le frené chocando nuestras katanas. Invoqué rayos Yin en mi espada y Gyuki se fue hacia atrás. Le amenacé con pegarle una estocada.
- Si te rindes no diré nada de esto a Nura-kun.
- Cómo te atreves a llamarle así...
Se movió increíblemente rápido  y me pegó un tajo en el brazo. Por poco no me quedaba sin él si no fuera porque me moví a un lado. Cuando iba a atacarle a la cintura, Gyuki me cogió del pelo y tiró.
- AAAAAAAAAAH - grité.
Caí al suelo. NUNCA me habían tirado del pelo en una pelea. Me daban ganas de pegarle una paliza, pero no podía moverme del suelo. La hoja de la katana de Gyuki estaba a escasos centímetros de mi rostro.
- ¿Ese es todo tu poder, Phoenix Slayer?
- Jugar con el pelo te hace una persona horrible. (Tenía doble sentido ewe ¡esos mechones que tenía en la cara no eran normales!)
- Akame Scarlet... te condeno por mentir diciendo ser la Phoenix Slayer y por embrujar al Señor del Pandemonio.
- Oye D8< ¡Que no soy una bruja! Y... - le miré con toda la ira que sentía - ... ¿yo... no soy la Phoenix Slayer?
Gyuki quedó frenado por cómo le estaba mirando, pero siguió con su misma expresión dura.
- Eres una farsante. Si fueras la verdadera, no estarías en esta situación.
Mis ojos ardieron.
- ¿No soy... la verdadera? ¿Quieres entonces a la verdadera?
- !?!?!
Montones de llamas me rodearon y Gyuki retrocedió varios pasos atrás sorprendido. Me levanté del suelo mientras una llamas me hacían una coleta y otras se incrustaban en el yukata. Cuando el colgante se transformó en dos dragones, miré a Gyuki, luego eché un vistazo al yukata y abrí más la falda.
- ¡OYE! ¡QUE SIGO SIENDO UN HOMBRE! - espetó Gyuki pensando que se me iría a ver la ropa interior.
- Apenas puedo moverme con este traje e_e ¿Tienes algún problema más conmigo?
- Tú... te pareces más a la que vino aquí hace tiempo a atacar al Supremo Comandante.
- Sí... Posiblemente allí era más fénix. Ahora la conciencia de Akame ha aprendido manejarme... aunque tal vez ahora se le esté yendo de las manos... - Akame Phoenix sacó a Nisshoku y le rodearon llamas - Si quemo la mansión del Clan, será por culpa tuya, por llamarme.
Gyuki gruñó y alzó su espada de nuevo.
- Reconozco que me has sorprendido... pero no permitiré que destruyas el Clan.
- No pretendo destruir el Clan... pretendo destruirte a ti.
Me lancé contra él como una bola de fuego y conseguí cortarle en la cintura con Nisshoku. Estaba detrás de él cuando gemía de dolor con una voz muy baja. Había conseguido herirle de gravedad en la cintura y le había quemado en los alrededores.
Justo en ese momento, alguien abrió la puerta.
- ¿Akame-chan? ....... ¡GYUKI-SAMA!
Nura nos miraba sorprendido y corrió a ayudar a su subordinado. Yo quedé paralizada en una esquina en la oscura habitación.
- ¡KEJORO-SAMA! ¡YUKI-ONNA!
Después de un rato, Kejoro y Tsurara aparecieron en pijama. Se percataron de la escena.
- ¡AAHH! ¡GYUKI-SAMA! - exclamó Kejoro
- ¡Llevadle a la enfermería! ¡Vamos! - dijo Nura.
- ¡Sí, Joven Amo! - dijo Tsurara.
Una vez se lo llevaron, Nura corrió a ver cómo estaba Kumato. Este pareció seguir de una pieza. Le acarició y se dieron un abrazo.
- Antes de que me grites, creas o no me creas, empezó él - dije.
- Lo sé.
- !
- Es su forma de ponernos a prueba~~
- ¿"Ponernos"?
- Sí. Yo también tuve que luchar contra él después de que sucediese a mi padre como Supremo Comandante del Clan.
- Dùh~
- Te has integrado muy bien hoy. Les has caído muy bien a todos. Sea lo que sea que él te dijese no le des importancia.
- ...
- Puedes volver a la cama. Te aseguro que no te pasará nada.
- Sí...
Me quedé inmóvil.
- Akame-chan, puedes volver a tu estado normal.
- No puedo.
- ¿Por qué?
"Por embrujar al Señor del Pandemonio."
- Por nada. Me voy.
- Ehhh - se acercó a mí - Oyee... No puedes irte a estas horas, es muy peligroso. Nos iremos a primera hora de la mañana si quieres.
- No hace falta...
- ... No te vayas. En serio... No sé qué te dijo Gyuki pero...
Me dirigí a la ventana pero Nura me cogió de la mano.
- ...
- Nura-kun, tengo que irme antes de que prenda fuego a tu casa.
Me miró a los ojos... con una mirada muy muy profunda ¿Qué intentaba decirme?
- Me gusta más la verdadera Akame. La que es dulce, amable, mona... con la que me río siempre.
- ¿N-Nani?
Nura se acercó más a mi, chocó mi nariz contra la mía. El corazón me iba a mil... Se agachó y me abrazó.
- Te quiero.
- !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! - me sonrojé mucho. Al rato, las llamas se apagaron y volví a ser Akame... con unas mejillas muy coloradas.
Le achuché contra mi y le acaricié el pelo.
- Daisuki.
Nos quedamos un rato abrazados. Después, me fui a la cama con Kumato y Nura nos arropó. Al rato me quedé dormida, sin saber si Nura se quedó allí mucho más tiempo.
Tuve un sueño. Estaba en la cabaña donde vivía con mis padres en China. Ellos reían juntos mientras estaban preparando la comida. Mi padre le dio un abrazo por detrás a mi madre y, cuando esta volteó la cabeza, se dieron un largo y hermoso beso. Fue extraño... porque hacía tiempo que no pensaba en ellos de esa manera. Cuando me quedé mirándoles, estos me miraron y sonrieron diciendo "Buenos días, Akame ¿Cómo estás? ^_^".
Cuando desperté por la mañana no vi a nadie diciéndome eso. Aparté las sábanas y me quedé sentada en la cama. Me percaté de que la puerta estaba abierta. Nura entró con una bandeja, me miró y dio un suspiró.
- Ksooooó... Te despertaste justo ahora...
- Etto .3. Ohayou? xDX
- Jeje~ Ohayo~
Se sentó conmigo y dejó la bandeja sobre mis piernas. Llevaba dos cuencos de arroz, miso, edamame, dos lomos de salmón a la plancha y un kumquat-nashi.
- ¿Y esto? ODO
- E-El desayuno <///< El nashi es para Kumato-chin xDx
Kumato se levantó, nos sonrió, cogió su fruta y empezó a mordisquearla.
- Ohhh suugoiii desune >D< Pero... ¿aquí solos?
Nura cogió su bol de arroz, sus palillos, un poco de edamame y comenzó a comer. Sonreí, cogí la sopa y bebí. Aquel desayuno fue genial. No había desayunado tanto en mi vida >O<
Con la tripa llena, fuimos abajo al salón. Kejoro me dio mi chihaya ya limpia. No dijo nada sobre lo que pasó por la noche, de hecho se portó igual que durante la comida y la fiesta.
Kumato se subió a mi hombro y fuimos a mi habitación mientras Nura hablaba con Gyuki, que seguía en la enfermería. Me cambié, cogí mis cosas y bajé a la planta de abajo para irnos ya de vuelta a mi Templo. En las escaleras me encontré con Tsurara.
- ¡Oh! ¡Ohayo gozaimasu Yuuki-Onna!
- Ohayo~ -3-
- Ha sido un placer conocerte. Tendré que volver a mi Templo ahora... asique ya nos veremos. :3
- ¿Ah sí? O.O - parece que se alegró en cuanto supo que me iba.
- Hai~ Espero que para la próxima podamos conocernos más.
- Hai Hai~ <.< ¿Dónde está el Joven Amo?
- Abajo. Ahora iba a verle.
Fuimos juntas a la planta de abajo. Nura estaba ayudando a Gyuki a caminar. El demonio me vio y dijo:
- Oh... Hola... Buenos días.
- Ohayo.
Gyuki se fue lentamente solo por un pasillo a reunirse con sus amigos.
- ¿Lista? - preguntó Nura con una sonrisa.
- ¡Hai!
- ¿Lista? ¿Para qué, Nurarihyon-sama? - preguntó Tsurara.
- La voy a acompañar a su Templo. Volveré en cuanto la deje allí.
- ¿NANIIIIIIIIIIIIIIII? - chilló Tsurara - ¿T-TE VAS A...? ¿CON...? ¡PERO....! D8
Kejoro se acercó a Tsurara.
- ¡Tsurara-chan! ¡Dijiste que me ayudarías con esto de tender la ropa!
- VOYYY ;____; GR, BAKA~!
- OEE X___X Bueno, hasta pronto Akame-sama. Y vuelva pronto, Joven Amo.
- Sí n_n
- Itterashaaaai!~
- Itekimassu~
Nos fuimos de la mansión del Clan Nura. Cuando iba a sacar a mis dragones, Nura me paró.
- No, no~ Demos un paseo por este bosque de aquí a la izquierda, que es muy bonito~. Luego podemos usar a tus dragones.
- De acuerdo~

Así lo hicimos y dimos un paseo. Los árboles de ese bosque sí estaban de color rojo debido al otoño, a diferencia de los jardines del Clan. Pasamos por una zona de flores kiku (crisantemos) y Nura cogió una de color rosa.
- Estas flores son de las pocas que viven en otoño... - comentó él. Me miró, se acercó a mí, y me la
colocó en el pelo - Ahora eres una ohime (princesa)~ -/////-
- o/////o ! B-Baka... .///.
Seguí con la flor el resto del viaje. Una vez invocamos los dragones, fuimos volando hacia mi Templo. Les pedí que nos dejasen justo en el puente del río. Caminamos, pues, hasta la puerta.
- ¿Entonces al final lo pasaste bien, Ohime-sama? -////- - preguntó Nura.
- ¡¡B-BAKA!! ¡No soy una ohime!
- MYAAAA! 8D - afirmó Kumato.
- Mientras tengas la flor lo serás <.<
- DUUUUÙH X///X
Miramos al frente y nos fijamos que justo en la puerta de entrada había dos jóvenes muy extrañas. Una tenía el pelo rosa recogido por una única coleta a su izquierda y los ojos azules, vestía con yukata rosa con obi azul, mientras que la otra tenía un largo pelo azul recogido por dos coletas, los ojos azules mar y vestía con un yukata azul y obi rosa. Muy combinadas una con la otra... irradiaban un aura celestial que no había visto antes.
- ¿Las conoces? - preguntó Nura - No parecen ser muy humanas...
Sacudí la cabeza y nos acercamos a ellas.
- ¡O-Oh! - dijo la de azul en cuanto me vio - ¡E-Es ella...!
- ???
- ¿Sí...? - la chica de rosa me miró más detenidamente y se levantó del suelo - ¡Síí! OoO
- Etto... Ohayo gozaimasu! ¿Qué os trae por aquí?
- Nunca te había imaginado así... Qué grande te has vuelto... - comentó la de rosa.
- ¡Aika, tenemos que responder! - reprochó la de azul.
- No se tratan con honoríficos. No deben de ser de por aquí - me susurró Nura.
- Perdón, perdón... - dijo sonriente la de rosa - Ni Hao, Akame Scarlet Targaryen. Ella es Miku y yo soy Aika. Somos embajadoras de China... y  tus primas.



No hay comentarios:

Publicar un comentario